miércoles, 19 de agosto de 2009

20 DE AGOSTO DE 1940: A 69 AÑOS DEL ASESINATO DE LEON TROTSKY

Testamento León Trotsky

Mi presión arterial (que sigue aumentando) engaña a los que me rodean sobre mi estado de salud real. Me siento activo y en condiciones de trabajar, pero evidentemente se acerca el desenlace. Estas líneas se publicarán después de mi muerte.

No necesito refutar una vez más las calumnias estúpidas y viles de Stalin y sus agentes; en mi honor revolucionario no hay una sola mancha. Nunca entré, directa ni indirectamente, en acuerdos ni negociaciones ocultas con los enemigos de la clase obrera. Miles de adversarios de Stalin fueron víctimas de acusaciones igualmente falsas.

Las nuevas generaciones revolucionarias rehabilitarán su honor político y tratarán como se lo merecen a los verdugos del Kremlin. Agradezco calurosamente a los amigos que me siguieron siendo leales en las horas difíciles de mi vida. No nombro a ninguno en especial porque no puedo nombrarlos a todos.

Sin embargo, creo que se justifica hacer una excepción con mi compañera, Natalia Ivanova Sedova. El destino me otorgó, además de la felicidad de ser un luchador de las causas del socialismo, la felicidad de ser su esposo. Durante los casi 40 años que vivimos juntos ella fue siempre una fuente inextinguible de amor, bondad y ternura. Soportó grandes sufrimientos, especialmente en la última etapa de nuestras vidas. Pero en algo me reconforta el hecho de que también conoció días felices.

Fui revolucionario durante mis cuarenta y tres años de vida consciente y durante cuarenta y dos luché bajo las banderas del marxismo. Si tuviera que comenzar todo de nuevo trataría, por supuesto, de evitar tal o cual error, pero en lo fundamental mi vida sería la misma. Moriré siendo un revolucionario proletario, un marxista, un materialista dialéctico y, en consecuencia, un ateo irreconciliable. Mi fe en el futuro comunista de la humanidad no es hoy menos ardiente, aunque sí más firme, que en mi juventud.

Natasha se acerca a la ventana y la abre desde el patio para que entre más aire en mi habitación. Puedo ver la brillante franja de césped verde que se extiende tras el muro, arriba el cielo claro y azul, y el sol brilla en todas partes. La vida es hermosa. Que las futuras generaciones la libren de todo mal, opresión y violencia y la disfruten plenamente.

Zanón Después de 9 años de lucha, se impuso la expropiación

El miércoles 12 de agosto los trabajadores de Zanón y el Sindicato Ceramista, junto a la CTA, ATEN, ATE, organizaciones sociales, estudiantiles y partidos de izquierda marchamos a la legislatura, que estaba tratando el proyecto de expropiación de la fábrica, que finalmente se aprobó después de la medianoche con 26 votos a favor y 9 en contra. Este triunfo de los trabajadores es una muestra más de la debilidad del gobierno de los K y de Sapag, que son incapaces de aplicar a fondo el plan de ajuste que le ordenan sus amos imperialistas, ya que el ascenso de las luchas obreras y populares del país y la provincia se lo impiden, como sucedió con la marcha atrás del tarifazo del gas hace muy pocos días.Este triunfo importante sucede dentro de un escenario favorable para las luchas y los luchadores, el mismo en el cual acaban de marchar más de diez mil petroleros por las calles de la ciudad, los pequeños productores del Alto Valle cortaban las rutas de la región, paraban los metalúrgicos en todo el país y se desarrollaba la huelga y los piquetes de los petroquímicos de Bahía Blanca… Por eso, más de las intenciones de Sapag de aparecer como progresista, la expropiación de Zanón significa el triunfo de la lucha consecuente de los ceramistas, que siempre contaron con el apoyo y la simpatía del conjunto de los trabajadores y el pueblo del Alto Valle y de todo el país.Independientemente de los límites de la medida, ya que ahora es necesario pelear por la estatización (bajo control obrero) para que el estado invierta en el mantenimiento y desarrollo de la planta, la lucha de los obreros de Zanón demostró que no son necesarios ni los patrones ni la propiedad privada para hacer producir las fábricas, ya que los trabajadores organizados y movilizados son capaces de hacerlo de manera constante y eficiente.La lucha de los obreros ceramistas de Neuquén y la expropiación demuestran en definitiva, que existen condiciones más que sobradas para redoblar la pelea no solo por la estatización de la fábrica, sino para enfrentar de conjunto, y derrotar, a los planes políticos, económicos y sociales que aplican desde el gobierno nacional y provincial.

Demián Romero / Secretario Gral. ATEN Centenario y Paula Carbajal, Lista Colorada y Convergencia de Izquierda de Neuquén