La poderosa clase obrera hará la próxima revolución
El Primero de Octubre se celebró el 60 aniversario de la revolución china con un impresionante desfile militar en la plaza Tiananmen de Pekín, el mismo lugar en el cual, en 1949, Mao Tse Tung proclamó: “China se puso de pie”. El país más populoso del mundo, que hace un siglo se anotaba entre los más miserables, expropió el capitalismo e hizo impresionantes avances para combatir la pobreza y el analfabetismo. Pero de la mano del mismo Partido Comunista que dirigió la revolución alejándose del capitalismo, China está desandando el camino iniciado en 1949, volviendo al capitalismo y convirtiéndose en el taller de producción de las multinacionales imperialistas.
La mayor revolución agraria de la historia
Durante los años veinte, el partido nacionalista Kuomingtang aplastó brutalmente la insurrección obrera de Shanghai dirigida por el Partido Comunista de Mao Tse Tung. La resistencia pasó a los campesinos del sur, donde el PC tenía una gran fuerza, pero la violenta represión del régimen del Kuomingtang obligó a los partidarios de Mao, derrotados, a iniciar la famosa Larga Marcha hacia el norte en 1934. Ocho mil hombres salieron y cien mil llegaron un año después.
Cuando Japón invadió China en 1937, las guerrillas de Mao se colocaron al frente de la resistencia, que culminó con la derrota del ocupante en 1945, al terminar la Segunda Guerra Mundial. Cuatro años después, tras una guerra civil que volvió a enfrentar las guerrillas comunistas con el Kuomingtang, el PC alentó una profunda reforma agraria, que le permitió ganar a la mayoría del campesinado, y derrotar a Chang Kai Shek, instaurando la República Popular China, que, asediada por el imperialismo con la guerra de Corea (1951), expropió a los capitalistas.China logró enormes avances sociales arrancando al país del atraso feudal y sus mujeres consiguieron grandes conquistas. En 1949, 4/5 de la población eran analfabetas. En 1976 era menos del 10%. En 1949 había 83 bibliotecas y 80000 camas hospitalarias, en 1975 habían 1250 bibliotecas y 1.6 millones de camas. El promedio de vida pasó de 35 a 65 años, al tiempo que se vivió un vertiginoso proceso de industrialización.Pero la conducción de esa gran revolución fue el partido – ejército guerrillero de Mao, que mantuvo un control burocrático y totalitario, imponiendo un rumbo zigzagueante, a la derecha y a la izquierda, como la campaña de las Cien Flores, el fracasado Gran Salto Adelante, y la Revolución Cultural de los años sesenta.Mao, que había liquidado el capitalismo en los años cincuenta, abrió las puertas a la China capitalista de hoy, con la histórica visita de Richard Nixon a Pekín en 1972, y el programa de “las cuatro modernizaciones”. Tras su muerte en 1976, Deng Ziao Ping promulgó el famoso lema: “un país, dos sistemas”, es decir, mantener el régimen comunista totalitario, pero volver al capitalismo. Deng impulsó la creación de las Zonas Económicas Especiales, convirtiendo la línea de la costa en la de mayor desarrollo urbano e industrial del planeta.En 1989, las enormes protestas estudiantiles y obreras, fueron aplastadas en la Plaza Tiananmen, para garantizar el curso acelerado de retorno al capitalismo manteniendo la mordaza totalitaria.
Cuando Japón invadió China en 1937, las guerrillas de Mao se colocaron al frente de la resistencia, que culminó con la derrota del ocupante en 1945, al terminar la Segunda Guerra Mundial. Cuatro años después, tras una guerra civil que volvió a enfrentar las guerrillas comunistas con el Kuomingtang, el PC alentó una profunda reforma agraria, que le permitió ganar a la mayoría del campesinado, y derrotar a Chang Kai Shek, instaurando la República Popular China, que, asediada por el imperialismo con la guerra de Corea (1951), expropió a los capitalistas.China logró enormes avances sociales arrancando al país del atraso feudal y sus mujeres consiguieron grandes conquistas. En 1949, 4/5 de la población eran analfabetas. En 1976 era menos del 10%. En 1949 había 83 bibliotecas y 80000 camas hospitalarias, en 1975 habían 1250 bibliotecas y 1.6 millones de camas. El promedio de vida pasó de 35 a 65 años, al tiempo que se vivió un vertiginoso proceso de industrialización.Pero la conducción de esa gran revolución fue el partido – ejército guerrillero de Mao, que mantuvo un control burocrático y totalitario, imponiendo un rumbo zigzagueante, a la derecha y a la izquierda, como la campaña de las Cien Flores, el fracasado Gran Salto Adelante, y la Revolución Cultural de los años sesenta.Mao, que había liquidado el capitalismo en los años cincuenta, abrió las puertas a la China capitalista de hoy, con la histórica visita de Richard Nixon a Pekín en 1972, y el programa de “las cuatro modernizaciones”. Tras su muerte en 1976, Deng Ziao Ping promulgó el famoso lema: “un país, dos sistemas”, es decir, mantener el régimen comunista totalitario, pero volver al capitalismo. Deng impulsó la creación de las Zonas Económicas Especiales, convirtiendo la línea de la costa en la de mayor desarrollo urbano e industrial del planeta.En 1989, las enormes protestas estudiantiles y obreras, fueron aplastadas en la Plaza Tiananmen, para garantizar el curso acelerado de retorno al capitalismo manteniendo la mordaza totalitaria.
El taller del mundo
A un año de la gran crisis económica mundial, China se ha convertido en la locomotora del mundo. Se espera que su economía crezca un 8% este año, la única de las diez mayores economías del planeta que crecerá. La Bolsa de Shanghai ha subido 80% y el FMI calcula que en los tres años desde el 2008 en adelante, China generará dos tercios del crecimiento de la economía mundial.Hoy, el gigante asiático es la tercera economía, a punto de convertirse en la segunda desplazando a Japón, el primer exportador, y el país más industrializado. China es el taller del mundo: 450 de las 500 empresas más grandes de la tierra, tienen una línea de producción en el país asiático, que produce dos tercios de las fotocopiadoras, microondas y zapatos, 60% de los celulares, 55% de los DVD, la mitad de las cámaras digitales, 30% de las computadoras personales y 75% de los juguetes.El gigante asiático tiene las mayores reservas económicas, es el mayor recipiente de inversiones extranjeras, consume 16% de la energía y es el tercer consumidor de petróleo de la Tierra. Es a su vez el mayor mercado de autos del mundo.Este “milagro” no es otra cosa que la explotación inmisericorde de los campesinos empobrecidos chinos, bajo el látigo de una violenta dictadura. Cuando Mao pronunció su discurso en la Plaza Tiananmen en 1949, los campesinos eran un 90% de la población. Hoy son menos de la mitad, cerca de 600 millones, uno de los procesos de urbanización más acelerados del mundo (a Gran Bretaña le costó 120 años llegar a ese nivel de urbanización), es decir, una revolución demográfica sin precedentes.
Ha nacido el sepulturero de la burocracia totalitaria china
El gigante está acumulando enormes contradicciones: millones de campesinos viajan a trabajar en las fábricas de las zonas económicas especiales en condiciones miserables. Por eso, China tiene uno de los niveles de desigualdad del mundo, y 207 millones de personas viven con menos de 1.25 dólares diarios. Con la crisis, millones son despedidos y vuelven a sus pueblos, para encontrar que ya no tienen más tierras, generando un enorme descontento social.Las protestas de la minoría musulmana uigur en la provincia de Xinjiang, en las cuales las mujeres jugaron un papel de vanguardia, dejaron en julio cerca de 200 muertos. Significativamente, los disturbios estallaron para protestar contra un ataque a trabajadores uigures en una fábrica de Nike, a miles de kilómetros de distancia, en la provincia de Guangdong.En agosto, los trabajadores de una acería estatal en la provincia de Hunan impidieron la privatización de la empresa, después de que 30.000 trabajadores de otra acería que se iba a privatizar, asesinaran a golpes al ejecutivo a cargo de la venta.Una de los más preocupantes expresiones de descontento es el movimiento llamado “tuidang” (“renuncie al Partido”), que ha recibido 60 millones de adhesiones. Un sitio web creado para juntar firmas, reúne entre 50000 y 70000 por día.A diferencia de 1949, cuando la más grande revolución agraria de la historia expropió al capitalismo en China, la nueva revolución que se prepara contra el salvaje capitalismo impuesto por la dictadura del PC, será encabezada por una joven y poderosa clase obrera, con una gran participación de mujeres, y por una creciente clase media que se resiste cada vez más a las prohibiciones, la censura y la falta de libertades. Los burócratas han creado a sus enterradores
Fuente: www.convergenciadeizquierda.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario